Ait! ostracismo romántico

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lavrenti

Señoras y señores
esta noche se pondrá en escena
un show retro y picante para adultos.
Dejad toda forma de sucia y vil hipocresía detrás.


Bienvenidos seais al narcisista espectáculo ideado por Tairy C. y presentado bajo la marca de AIT!. En el programa se anuncia una velada cargada de autoerotismo fetichista, narcisismo y misantropía que busca provocar en la audiencia sentimientos de melancolía, soledad, pérdida, dolor, repugnancia, lujuria y, quien sabe si, pío misticismo (no como Teresa de Calcuta).

Luces, mujeres y canciones; emociones fuertes para escapar de esta gris realidad, de la mediocridad de esta era!. Demos inicio al Spettacolo Adulto de Romanticismo Oltranzista.


En mi habitación vacía
la melancolía reluce
¿Qué puedes hacer tú?
No disfruto de compañía
y el disco gira y gira, y de nuevo volverá a girar

AIT!, aparte de la Asociación Internacional de Trabajadores y Fuera! en friulano, es el proyecto post-industrial del crooner decadente Tairy C; y este disco es el tercero de su carrera (primero que conocemos), aparte de splits con Novy Svet y otras colaboraciones. Editado en abril de este año en su propio sello, Punch Records (confiesa no tener experiencia en el mercado), nos llegaba, en versión completa con una cuidada presentación minimalista, por correo con intención de enfrentarnos a grimosas escuchas que hicieran temblar prejuicios musicales e ideológicos.



1. Uno Spettacolo Adulto
2. Io Ballo da Solo
3. Tempo Morto
4. La Libera e Democratica Societa' Moderna
5. Le Tue Labbra Grigio-Blu
6. Dio
7. Una Fantasia Strumentale
8. Il Mondo e' Morto (Trent'anni fa')
9. Una Dedica
10. Donna


La propia portada supone un primer asalto con la fotografía de una verosimil figura desmembrada desnuda y de apariencia oriental y excesivamente joven. Pertenece a la serie de fotografías ma poupée japonaise de Mario A. con cierta inspiración en el arte degenerado de Hans Bellmer.



Su música resulta tremendamente original y extremadamente decadente. Es un trabajo egocéntrico, pretendidamente posfascista, prepotente y perverso. Tendremos que arrastrarnos bajo la amenaza del látigo por sus espesas atmósferas marcadas por el tedio y la presencia constante de la melancolía.

"Multiesvastizado" Tairy C. (uno, dos... mil símbolos solares!) representa la enfermedad del dandismo, enfrentado y asqueado por lo que le rodea, alejado de una sociedad de la que reniega y elevado sobre un vulgo que desprecia. Es entonces cuando el spleen cuando se hace el dueño de intérprete y oyente.

Tras la dulce sensación de la soledad y la orgullosa asocialidad de Io Ballo da Solo nos veremos sumergidos en la interminable sensación de vacío, frustración o aburrimiento de Tempo morto. No podremos despegar de nuestra piel los lentos ritmos que acompañan nuestro deambular por nubes de tabaco, sudor y exceso hormonal de las oscuras discotecas y cuartos en los que sacrificamos nuestro corazón... mientras suenan extrañas composiciones para el baile como La Libera e Democratica Società Moderna, falsario orden que enmascara una moderna forma de dictadura. ¿Tairy C. es un 100% liberal?


Habremos de enfrentarnos de nuevo a la traumática pérdida e imposibilidad de olvido de tus ojos azul grisáceos en un tema pleno de nostalgia y sufrimiento autofágico... para llegar a la revelación de Dio, el Altísimo y Divino Padre y Bestia ante la que nos arrodillamos sus pobres y humildes esclavos. Ante nosotros se mostrará diáfana la esencia pura de la creación, el mal y la emanación de su incondicional odio. Más que maravillarnos comenzamos a sentir un profundo temor ante los gruñidos surgidos del oscuro alma humano, a imagen y semejanza de su Creador.

El único momento de ligera relajación será en el delicioso pasaje de la masoquista Fantasia Strumentale, antes de llegar a la gravísima Il Mondo è Morto (Trent'anni fa). Y es que no podrás entenderlo, porque no es una sensación, no es una obsesión, no es un estado de alienación; sencillamente es cierto que el mundo está muerto, y no hay nada; no hay nada más.

Y aún así habrá momento para el ligero desbarre post-punk rockabilly de Una Dedica, tema dedicado no a un amigo, ni a un antiguo amor, sino a un grandissimo coglione. Vaffanculo!. El disco no podía acabar en el lamento sino que tenía que cerrarse en plena efervescencia escarnecedora del otro y con las cínicas instrumentaciones que derriban toda esperanza de romanticismo en la que la Donna se ha convertido en enfermedad.

Ya sabes, el amor viene y se va
oh, y cuando se va, oh, cuán doloroso es!
Ya sabes, cuán doloroso es tener demasiada libertad.
Maldita sea, te odio, indecente señora
indecente verguenza!


Curioso contraste el de este agrio y desagradable final de ataques al que no soy yo, bien desde la posición de superioridad o desde el odio derramado por el frustrado, respecto al inicio en el que nos embardunábamos de orgullo respecto a nuestra individualidad y soledad. La fantasía egocéntrica plasmada en necesidades y exigencias egoistas no correspondidas por el otro estalla así en accesos de ira. Ay! Tairy, Tairy, dirige tus pasos hacia atrás y tus ataques hacia tí mismo.

Romanticismo Oltranzista es un disco excesivo, construido sobre ritmos y melodías reiterativos que llegan a volverse agobiantes; siendo éste su gran valor y lo que le dota de personalidad propia. Es un disco para oyentes sin complejos, con gustos amplios y estómagos duros, ya que supone adentrarse tema tras tema en los aspectos más oscuros del voluble comportamiento y personalidad del ser humano.


Tokio en primavera

La voz de Tairy es desagradable y la música tiende a volverse obsesiva en un disco ante el que el primer encuentro puede ser muy negativo pero que genera escucha tras escucha un mórbido interés. Algo tiene que levanta deseos de nuevas escuchas y posteriormente se torna en agrado y alta valoración. Te enfrenta a demonios del ser que no existen sólo en la letra sino que, si buscas un poco en tu interior, descubrirás dentro de tí mismo.

No comparto su glorificación de la individualidad, ni me convence que gire con Boyd Rice... algunas de sus frases me inducen temor y sus tatuajes un evidente resquemor, pero sigue generándome atracción. Sus formas son desagradables e incluso censurables, pero se contrapone a otros aspectos que pueden generar la idea de que no todo es tan directo y evidente; de que ciertamente hay que seguir cuestionando el personaje y dejar todo juicio definitivo en suspenso.

Así la elevada consideración en que tenemos (yem comparte esta opinión) al disco en lo musical, se ve magnificada por la marabunta de sensaciones, opiniones y discusiones internas que genera. Parece que Tairy C., bien de forma sincera o manipulando un alter-ego, ha decidido representar ese viaje por el lado oscuro y devolvérnoslo descarnado para que lo tengamos que batallar por nosotros mismos. Desde luego, él no va a darnos la respuesta.


Tokiotas en primavera


De una entrevista en Heathen Harvest:

    ¿Tienen alguno de los dos trabajos un tema central o mensaje que estuvieras intentando comunicar a través del disco?

    La respuesta es sí en el primer CD y un poco en el segundo, pero, me váis a perdonar, no deseo dejar claro cuáles son. Tengo esperanza en que los oyentes lo entenderán por sí mismos... no quiero explicar mis canciones, dejo que la música hable por mí.



Tiempo infame, vago como un perro sin ningún camino que seguir
Tiempo infame, no me hables de todas las cosas que me rodean,
me gustaría quemarlo todo!


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