Aleando elementos diversos están Quid Rides?

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lavrenti

Quid Rides? es una de esas bandas que andan por Madrid de las que uno puede llegar a no saber nada si no pone un poco de empeño... nosotros, en un agraciado momento, fuimos bendecidos por conocer la iniciativa de los Liar Festivals y en el fragor de sus noches se abrió un claro para que nos llegaran algunos de los leves pasajes ambientales que dan inicio a muchas de sus canciones. No es éste el único universo en el que se mueven ya que su música da para cierta inmersión en desarrollos ligeramente psicodélicos y está expuesta a los estallidos de intensidad del post-rock y la distorsión, sin desmerecer transitos por composiciones más ligeras con cierto aire pop.

Era allá por los años 2006 y 2007 cuando podíamos verlos tan pronto con Reznik o ... all fits, que abriendo aquella apretada pero maravillosa noche instrumental con Yndi Halda. En un abrir y cerrar de ojos se hizo 2009 y entre la multitud surgió Rakus con su primer CD en las manos que cedió a muzike.org para ser sometido a la crítica de nuestro magno líder, quien ejerce el poder omnímodo desde su trono aunque sea apenas sobre sí mismo.

Perdido entre delirios de grandeza, y falsedades, de comentarios de discos y conciertos diarios, sus primeras notas sobre Amalgama comenzaron a languidecer (como tantas otras!) y a poco pudieron quedar injustamente acumulando polvo. Pero hete aquí que el grupo se dispone hoy mismo, sábado 11 de julio, a presentarlo en directo en la sala Cats de Madrid, y los rebeldes hemos tenido que asaltar sus estancias y recabar los manuscritos, apenas frases inconexas de una mente carcomida, para homenajear este trabajo como se merece e incitar a la asistencia al concierto a nuestros lectores.



Ánima... las lágrimas caen inertes en la tierra del no presente... sí! cabe la posibilidad de comenzar a caminar de nuevo y retonar de un destierro voluntario! lo anuncian las guitarras nacientes y el tremor del bajo... nos persiguen, luego cabalgamos!

Sicilian... delicada caída sobre la densa oscuridad... en la cabeza del monstruo nace una estrella que lo consume. Gas y polvo dan lugar a puntos rosados que pronto comenzarán a brillar con más fuerza. ¿No es el momento para el baile? No es una mera labor de acreción para el estallido y la expansión....

Down... el último reflejo de voz llevó a un silencio oscuro ... santo, santo, santo claman los serafines y los cuatro jinetes del Apocalipsis por cada una de las tres personas de la Trinidad. Se hacen una con la crecida, y desbordan en una oleadas de emoción...

Tiempo de marcianos santos... tiempo sobre el tiempo perdido... otros matices aparecen, algo de melancolía previa a un desenlace brillante y ardiente, alentado por los platillos... en estado de sublimación nos filtramos entre las rejillas de este encierro...

Underground... el flujo vital se mueve por ritmos... en la altura deseada ya nos hallamos y sin excesos permanecemos... deseo de giróvago, sería una buena forma de existir...

Mooz... odarusnec... el psiconauta debe dejar un espacio para lo banal y lo jocoso... la caja marca, y los exaltados claman, o no tendría tanto sentido...

Sebem... camina entre clavos y lo sabrás... o mejor, corre que ya habrá tiempo para curarse las heridas... quizá tenga aromas de 36 grados aunque acaben haciendo el macarra.

Regalo de Dios... una vez dije una frase que era muy vieja... drones espaciales, aunque no pueda existir sonido en el vacío, y cajas sublimes anuncian una nueva floración rocosa... definitivamente su música es roja...

y tras el silencio, una nueva posibilidad que habrá de surgir del caos experimental. Algo he leído de un posible segundo disco a finales del 2009 o principios del 2010, lo que de momento es físico es este testimonio de años de conciertos y ensayos y, sobre todo, conciertos (repetición ex profeso). Es allí donde su música tiene mayores posibilidades de expresión y donde puede ser disfrutada al completo.

En este disco encuentro, aparte de temas que pasaron demasiado rápido del directo al recuerdo, buenas intenciones y trazas de originalidad. Quid Rides? no necesitan entregarse al exceso para emocionar, aunque es siempre aplaudido por estos lares puede hacer surgir dudas sobre su veracidad, y dota sus temas de suficiente bruma como para dar inicio a la mente para divagar, sin provocar barullo. Es cierto que encuentro algo raro en ellos, algo que no acabo de entender (así me pasa con Reznik), pero ¿no le da esto más valor?

Es inevitable que todo comentario sobre él esté mediatizado por el cariño a las noches vividas y la adhesión al esfuerzo de estos músicos y su público por hacer de la música un motivo, o una excusa, para el encuentro; así que lo mejor es que déis una oportunidad a su post-rock leve, en el caso de que no les hayáis escuchado antes, y visitéis myspace donde se encuentran disponibles hasta cuatro temas... y si váis al concierto tenéis la opción de entrada + disquillo por 10 euros, que está muy bien.

Si tenéis algún tema familiar, boda, bautizo, recordad que tenéis otra oportunidad la próxima semana cuando toquen precisamente con Reznik en La Faena... si queréis concretar detalles, echadle un ojo al calendario.

Nebulosa de Carina...




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