Esoterica y Deidre, disfrute total

Comparte en:
pain


Una extensa delegación de Muzike se personó en la Staff en pleno centro de Madrid, sin demasiadas expectativas formadas y con información algo difusa sobre Esoterica, una banda británica que aterrizaba por segunda vez en nuestro país en el último medio año. Sabíamos de ellos que estaban teniendo un importante apoyo por parte de la prensa especializada, que su único disco hasta la fecha The Fool había estado producido por John Fryer (Nine Inch Nails, him) y que venían de tocar en el gran Hammersmith Apollo de Londres taloneando a him. Aunque lo principal era sin duda que su extraordinario álbum de debut nos había enganchado desde la primera escucha. Sin embargo un montón de contradicciones se sucedieron aquella noche, la primera al echar un primer vistazo a la Sala Staff, que como mucho aspira a ser un bar de copas con escenario, ¿pero esta banda no era más “importante“?. Pues parece que no, porque en ningún momento se llegó a llenar el local en cuestión. Pero no nos saltemos sucesos porque las primeras apariciones del grupo ya fueron curiosas. Ahí estaban los jovencísimos músicos de Esoterica (más tarde nos enteraríamos que alguno no supera los 21 años) con unas cervezas merodeando por aquel sitio. Cuando escuchas The Fool, con su idiosincrasia particular y todas esas referencias a TooL, te imaginas inmediatamente a unos tipos como Danny Carey y Maynard James Keenan, superhombres con halo de grandeza multidimensional, pero no, allí estaban unos “chavalines” de Warlingham nerviosos y pendientes del grupo que les precedía en el programa, pasando prácticamente desapercibidos entre la gente.


Los encargados de abrir la noche fueron los madrileños Deidre, con una propuesta interesante y un sonido típicamente de trío. Sacaron todo el partido que pudieron a las limitaciones acústicas y técnicas de la sala, y a pesar de que el vocalista Fernando Galindo se dirigió varias veces al público para decir que no se encontraba bien y que pasaba por alguna clase de proceso gripal, su set no aburrió a nadie. Tuvieron buena presencia en el escenario (qué especiales son los tríos!) y algún tema al que se le puede sacar buen partido. Por no tener información sobre la banda no fueron incluídos en el previo, pero permaneceremos atentos a partir de ahora ;)

Seis temas presentaron de su disco Triste del que podréis escuchar cuatro cortes en su página. Un proyecto polifacético cuyo interés va mucho más allá de lo estrictamente musical y que busca en la mezcla de propuestas un vehículo a través del cual dar rienda suelta a su creación artística. De su sonido destacaría (aparte de su conjuntada actuación) la forma de unir la voz de Fernando con los coros graves de su bajista Sandra González.




Tobias se concentraba en el centro del pequeño escenario, quizá algo nervioso. Lo bueno es que todo aquello aportaba un regusto especial al show , las sensaciones que produce un grupo en expansión, comenzando su camino al estrellato y situándose en ese punto en el que se juntan la inocencia y la grandeza.

El concierto fue simplemente fantástico. La actitud de la banda era la de estar casi tocando en un gran festival. En las primeras fases del espectáculo nos ofrecieron un ristra de geniales temas como Valium, Pushing Providence o Salvation, todo ello con una fuerza sorprendente en esas condiciones, y con un Tobias totalmente entregado a la causa, lanzándonos su chorro de voz canción tras canción. Matthew muy compenetrado con el cantante rasgaba su guitarra sacando partido a una pedalera (que quisiéramos haber hecho nuestra ;), y Charly sufría al bajo.

Se iban sucediendo todos los temas de The Fool con intensidad; si Deidre había conseguido explotar el sonido de esa cueva, lo de Esoterica ya fue el colmo. Un “Don’t Rely On Anyone (hit del grupo, del que podéis ver el vídeo en youtube) apoteósico encendió definitivamente a la gente que estaba disfrutando casi en la intimidad de un gran concierto de rock frente a una banda que da visos de convertirse en una referencia. Impresionante Samples. Fue uno de los puntos álgidos del set con un Tobias desatado y entregado.

Muy buena interpretación hubo de Life is Lonely y un emotivo Adam que a lavrenti le hizo sentir de lo lindo. Repasaron completamente su único disco, y ante la insistencia de los que allí nos encontrábamos el grupo volvió a salir (algo sorprendidos hay que decirlo). ¿Qué ocurrió? Pues sorpresa, sorpresa, no les quedaban temas en su repertorio, así que se arrancaron de nuevo (bajo petición) con el combo Valium-Pushing Providence y el público disfrutó de lo lindo (también el cantante de Circus). ¿Repetido? que más da, el caso es que siguieran tocando y mantuvieran vivo el sentido de los bises.

Tampoco en esta ocasión pudieron abandonar el escenario y ante el estupor de los que allí estábamos hicieron una versión algo libre de Ironman, el clásico de Black Sabbath (pedida por uno de sus supporters). Especialmente gracioso sonaban los 'giberish' del cantante que no sabía la letra... Desde un lateral hacían señas a la banda, “una más y tenéis que terminar”. Por supuesto, contraatacaron con Don’t Rely On Anyone y abandonaron los instrumentos dejando un fantástico sabor de boca.

Eso sí, no queremos perder la ocasión a invitar a que la gente haga chistazos durante los concierto pero que, por favor, no los repita entre cada una de las canciones del grupo. Destacamos la de 'tocad paquito el chocolatero', 'a ver donde vas a meter la batuta esta noche'... o ante los intentos de explicar las canciones en inglés, 'y pensarás que nos vamos a enterar' X-D ... yo que sé al menos el chaval intentaba comunicarse con algo más que un 'hola marriiiii'.


redactor de muzike flipándolo

Varios motivos hicieron esa noche mágica, la inesperada sencillez y poca veteranía de la banda, la forma de encender una sala no demasiado bien acondicionada, la entrega del grupo, algunos fans que había infiltrados por el público (algunos se sabían las canciones al dedillo), y la música, por supuesto. En general podemos decir que fue una forma “diferente” de vivir un gran concierto, uno de esos que ayudan a que uno se reconcilie con todo este mundillo que tanto nos apasiona, desde la base y a través de unos muchachos que desprenden ilusión a raudales.


La Charla con La Banda



Fin del concierto, el grupo baja de la tarima y en la sala empieza a sonar la cancerígena pachanga nacional, vuelta al formato bar de copas. Habíamos acordado tener unas palabras con Tobias así que nos acercamos y tras las fotos de rigor tratamos de cruzar algunas palabras, lamentablemente el ruido del lugar hacia imposible poder mantener un diálogo, y es en este punto donde el staff de Muzike.org vive uno de los momentos mas bizarros de su andadura periodística. Tobias hace un amago de llevarnos a una habitación contigua supuestamente acondicionada para el grupo, pero creo que ni ellos mismos tenían hueco, así que ni cortos nos perezosos nos introducimos en los servicios. Frente a los urinarios, mientras unos entraban a miccionar tranquilamente y otros trataban de conseguir una firma para su entrada, hablamos con el vocalista de banda.

Obviamente las circunstancias no nos permitieron hacer una “entrevista” en condiciones así que se limitó a un ameno diálogo. Entre otras cosas, ante nuestras preguntas Tobías nos contó que las inevitables comparaciones con TooL son algo positivo para ellos, les ayuda a llegar a más gente y que en realidad es un estilo que no practica nadie en Inglaterra a excepción de ellos mismos. Además insistía en que todavía tienen mucho que aprender, que sólo han puesto un álbum en la calle y será mas delante, de forma natural, cuando vayan depurando su sonido hacia tesituras más personales. En esa misma línea hablamos de dificultad de progresar en el Reino Unido donde parece que los fenómenos tipo Pete Doherty tienen reservado el derecho al superestrellato.


Nos interesamos por el sentido de temas como Valium (marca registrada de Roche International) que plantean como un sustituto adictivo menos peligroso para la sociedad que la heroína. No conseguimos hacernos entender respecto de las implicaciones éticas de la dependencia de una sustancia legal patentada (diazepam genérico ya!). Ante la pregunta de si conocían a Blood nos dijo 'No'.

También fue interesante su actitud respecto las transmisión de la música a través de internet. A nadie le es ajeno que muchos de los que allí estaban habían tenido acceso al disco gracias a la red. Nos comentó que no lo parecía una mala vía para poder conectar con un mayor público, y que en realidad no suponía un perjuicio para su carrera. En cualquier caso nos quedamos con el aquel momento en el que este cantante con cara de no haber roto un plato en su vida y con una sorprendente actitud de ilusión/interés por la no-entrevista, nos contaba que para él, el hecho de poder transmitir algo, bien a través del disco, bien esa misma noche en el escenario, ya es todo regalo, un éxito por encima de todo lo demás. Misión cumplida y una esperanza de vernos de nuevo en Reading.


el Gran Shoko da su aprobación



Artículos relacionados: