Festimad 2007, a mí... sí!

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lavrenti

Ais! ais! Ya ha pasado más de una semana de Festimad y estos impresentables no han comentado nada! Pues si tuvieron problemas para acreditarse este año más los tendrán para el siguiente mwahahaha.

Bueno pero al final aquí estamos con nuestras típicas justificaciones: examenes, estados emocionales provocados por la astenia primaveral... y lo hacemos felices y contentos por haber disfrutado de un, me atrevería a decir, muy buen Festimad.

He oido a la gente comentar que fue un Festimad corto de cartel y caro. Depende de como lo veas. Aunque las estrellas internacionales quedaron reducidas a cuatro o cinco grupos, las nacionales brillaron (a mi gusto) casi a más altura, y si Pearl Jam o Slayer hubieran venido en gira con un sólo telonero de 35€ no habría bajado la entrada.

También que fue descompensado entre el viernes y el sábado. Puede ser y se notó en la diferencia de público entre uno y otro día. Slayer ya tocaron en 2004, y Pearl Jam eran demasiado Pearl Jam. Y que no hubo acampada y que eso limitaba las posibilidades de la gente de fuera a ir los dos días. Cierto pero creo que podemos llegar a entender la tranquilidad que debe dar a la organización evitarse los problemas de orden público de la acampada. Si fuéramos más cívicos!


A pesar de estas pequeñas desviaciones, a mí el festival me gustó y me alegra que tras el fiasco de la Cantueña (narrado aquí) y el Festiraro del año pasado con Tool y Alice in Chains (crónicas en los links), creo que marca una línea ascendente que esperamos se concrete el próximo año y devuelva a la Comunidad de Esperanza Aguirre un festival grande, como lo ha sido en muchas ocasiones a lo largo de su historia. Ojo! que ha habido gente que ha considerado el concierto de Pearl Jam como el mejor acontecido en todas las ediciones.

Viernes
o la reivindicación de Migraine


Tomaba la cuesta para llegar al estadio de Butarque cuando comenzaban a sonar el primer tema de Tao Te Kin. Maldición, iba a perderme el comienzo de la actuación principal del festival! Pues no, no sólo el principio sino todo el concierto ya que cuando subí a toda prisa a las gradas no pude ver más que al grupo retirándose del escenario. Problemas de última hora con las acreditaciones (seamos muzike.org o no siempre desaparecemos de las listas) retrasaron el acceso. Una verdadera pena aunque ya les volveremos a ver dentro de un año o dos cerrando escenario.

A continuación podemos ver una cutre-reconstrucción del momento:



Podéis oir temas de Tao en su myspacey y bajar su demo desde su web oficial. Rápidamente el escenario sería tomado por Enemy of Myself con su propuesta ciertamente interesante de metalcore pesado con voces y actitud aguerrida. Jugó en su contra que durante gran parte de su actuación el micro de su bajista no se escuchaba así que se perdió el contraste de las líneas de voz. Parecía que su set se iba a tener que acortar mucho por temas de tiempo pero antes de marcharse pudieron interpretar dos temas más que podían haber sido cuatro si nos hubieran preguntado.

El grupo tiene a disposición de todos su primer disco autoproducido (junto a Raúl Lorenzo de Sou Edipo) y autofinanciado, Time is Against Us en este link o para escucha en su Myspace de Enemy of Myself. Muy recomendable.



Por lo que pude contrastar con alguna gente, el concierto de Anathema fue quizá la actuación más incomprendida del festival. Con una entrada aún baja y todavía con sol intenso la banda salió al escenario y la tensión que se había ido acumulando en las primeras filas comenzó a derramar lágrimas. Los Cavanagh resultaban muy cercanos y parecían sinceramente felices, la iluminación del preciosa era preciosa y la luz de la tarde comenzó a tornarse grisácea según las nubes iban arremolinándose para crear el ambiente idóneo.


El aura especial que se creó se iba diluyendo según se iba alejando uno del escenario y tengo cierta impresión de que el nivel del disfrute dependía de la distancia y del número de conversaciones que uno mantuviese. Quien esto escribe en su encierro solipsista de el redactor más solitario de madrid, reconociendo ser oyente casual de Anathema (sin haberlos escuchado nunca suficiente ni todo lo merecido), se sintió profundamente emocionado en muchas ocasiones y valora enormemente este, su primer, encuentro.


Sonaron Hope, One Last Goodbye, la muy post-rockera nueva Deep; bella fue la colaboración de Lee Cavanagh como voz femenina y cerraron con un espléndido Comfortably Numb de Pink Floy. Lo único malo, el vocoder! Bueno y la calidad de mi cámara que hizo desaparecer las facciones de los Cavanagh en casi todas las fotos xD

A continuación, un ejemplo y otro intento de reconstrucción (con la faz del mejor vocalista sin grupo en castellano, inglés y japo):



Devildriver me gustaron bastante más de lo que esperaba. Creo que comencé a desinteresarme de lo que hacía Dez Fafara desde aquel The roof, the roof is on the fire voceado en el Chill Out. ¿De verás sacaron un tercer disco? De este proyecto creo haber visto sin demasiado interés un par de vídeos en Sol Musicore.

Trallero, ¿no? Así fue y la gente en las primeras filas respondió con las primeras andanadas en el pit del festival, lavadoras incluídas como centrífugo era el movimiento hasta del batería! Me lo pasé bien y a pesar de conocer los temas de alguna forma conecté con el grupo... como no pasó con los siguientes. Su último disco, The Last Kind Words, se editó ayer para Europa en RoadRunner Records!.


Y aquí es cuando me pongo serio y lanzo una reflexión que a más de uno le puede molestar. Eh eh, es mi opinión, no tienes porque compartirla pero no la liberticides. Slayer no me gustan en directo y es lo que trataré de explicar.

En todas las ocasiones que les he visto (una? dos? tres?) me han dado la misma impresión; es un grupo que en directo resulta increíble para quién es fan, conoce todos sus temas y se los berrea-inventa. Pero su forma de plantarse en escena y de acometer su música creo que deja fuera a todo el que ve a la banda desde fuera. Vale, a mí me gustan temas suyos sueltos pero me resultan infumables en directo. Son previsibles, espesos; rompen todo el ritmo con las esperas intermedias y aunque lo intentan son poco comunicativos.


juro que esto es slayer

Vivirlo desde fuera es un poco frío para mi porque cuando comienzo a enganchar con un tema, acaba y se apagan casi todas las luces. No se ve a nadie en el escenario durante un rato, y entonces Tom Araya se acerca al micro lentamente. Mira para atrás, dice algo y se ríe. Dice "Hola" y vuelve a mirar hacia atrás y se ríe. Se va; un minuto después comienza un tema.

Y no es que me disgusten, es simplemente que no consigo ni entretenerme :?



Por ello me pareció mucho más interesante la actuación de Migraine. Mostolés es la reserva extrema de occidente y así el brutal-core de esta gente sonó potente, completo y consistente. Toda una muralla de sonido con la que se me pasó el tedio y volví a sentir estertores cervicales.

Leemos en su myspace que su música es "una demoledora mezcla de tralla, directa a tus tímpanos (..) hard core, ambientes tétricos, punk, metal en sus vertientes mas extremas... en conclusión ZURRA DE LA BUENA". Y es que aquí hay gente de Perpetual Hate, Rotten Minds y Orujo de Brujas!.

Tuvieron poco tiempo y la mayor parte de la gente se había marchado, pero los que nos quedamos creo que asistimos a uno de los mejores momentos del viernes. Yo por lo menos salí eufórico, y ya estoy buscando la forma de oir esos seis temas de su primer trabajo.

Más fotografías en la galería Festimad 2007 I



Sábado,
o Tenpel Jam y cierra Festimad!


El sábado comenzaba mejor porque sin problemas y agradeciendo a la organización su buena disposición accedíamos al festival para enfrentarnos a una larga e interesante jornada. Comenzaría con el rnr ligeramente rockabilly de Sussy & the Pornorockets. Aunque algo lejanos de mis gustos estilísticos, aportaron variedad y algo de frescura a una tarde que se iniciaba con amenaza de lluvia. Nos divertimos. Siento no poder linkaros a web oficial o myspace porque no lo he encontrado :?



Apurados de tiempo comenzarían todos estos primeros grupos, así que la joven formación The Out of Cash se dió toda la prisa que pudo para hacerse con el grande escenario del estadio de Butarque. Contaron con el apoyo de unas primeras filas bastante más pobladas que el día anterior. Su propuesta punk-core directo en inglés y detalles interesantes a las cuerdas. Podéis escuchar tres temas de un primer EP en su the out of o acercaros a su concierto en Superbowl del sábado 30 de junio.



Tenía ganas de ver en directo a Avenues & Silhouettes porque a pesar de tocar de forma habitual por Barracudas y otros locales de Madrid siempre había coincidido con recaídas asténicas u otros conciertos. Desde el primer tema en el que su vocalista bajó al amplio pasillo que había delante del escenario derrocharon ganas y esfuerzo para alentar al público. A mí me convenció su directo aunque ya algunos conocen mi debilidad por las voces "grujurosas".

Mención a Manu ¿? el guitarrista que teníamos más cerca... saldrían vencedores del concurso Gibson aunque eso levantase alguno que otra ampolla (jejejeje) entre fieles a esta marca. Podréis verles dentro de poco (el 7 de julio) en el Brutal Noise Fest en Apolo (Barcelona) junto a bandas como The Marriage o Death Before Disco. Tras el verano fechas por Europa!



Y, por supuesto, Tenpel; cabezas de cartel ya! No tengo palabras para lo que esta gente hace. Son intensos, musical y emocionalmente; entregados, sinceros... reales. Las reinterpretaciones de sus temas en directo son sorprendentes y maravillosas, y Kantz... en fin, aplasta el micro contra su pecho y sigue ocupando todo con su voz. Tuvieron que cerrar con Redimenlacolía que nos dejó impactados por un largo tiempo. Aplazamientos, cancelaciones, decidme que no pasa nada, por dios! Necesito verlos de nuevo, pronto... pain, pronto!



Poco a poco fuimos recuperándonos de la catarsis para acercarnos a ver a Unearth. Lo esperado, garra, velocidad, cambios de ritmo y actitud recia en el escenario. Entre el público, la chavalería con los ejercicios gimnásticos. No era Madrid Hardcore y la gente resultaba extremadamente cuidadosa, pero muzike.org, a través en the dancer, estuvo allí descargando furia en el pit!. Mi candidato... con gorra azul y camiseta de I Killed the Prom Queen dándolo todo.



En el entreacto a la llegada de The Used, el grupo de teatro Espantapájaros de Tabutopía en un lateral del escenario y un poco afectados por el mal sonido trataba de construir una representación del encadenamiento sádico al que nos somete la realidad. Me costó acabar de entenderlo, en parte por llegar algo tarde a verlo; aunque sí asistimos a los vergonzantes aplausos y silbidos de quienes estuvieron pasando durante un buen rato y sólo tomaron interés cuando hubo un desnudo femenino. Si es que en el fondo somos unos bakalas...



¿Y The Used? Flojitos, flojitos. No había oido más que el par de temas disponibles de su último disco Lies for the Liars y aunque el principio post-rockero me sorprendió, el interés fue decreciendo al constatar (desde mi punto de vista) que no aportaba nada musicalmente a lo que ya tenemos en cientos de bandas (y quizá mejores).

Trataron de ser muy participativos con el público y con los de seguridad; el cantante le dedicó unos cinco minutos de insultos a uno de ellos por motivos que desconocemos (no haremos valoraciones), pero a diferencia de como comentará the dancer a continuación respecto a Pearl Jam daba cierta sensación de buen rollo "scripteado", una complicidad fingida puesto que todavía no se había llegado a crear con el público.

El punto de inflexión en el que el show todavía podía haber sido bueno fue la mala versión (tras el parón) de Michael Jackson. También puede ser que fuera precisamente el punto de desconexión mental definitivo para centrarse en lo que estaba por llegar... y es que lo que estaba por llegar era el pain que nos hizo sufrir hasta el último momento ilocalizable en los tuneles de metrosur.


Antes de retirarme a las sombras para dar paso a la crónica del concierto de Pearl Jam por the dancer he de comentar que para mí verles por primera vez fue abrumador. Íbamos predispuestos a una experiencia Seattle... es la música, ¿de acuerdo? Sus canciones; la primera vez que escuché su música fue la primera vez que sentí que no estaba solo... y lo fue. Tuvo todo. Momentos de debilidad, preocupación, debacle física, ensoñación, risa y llanto, y exhaltación de la cósmica amistad. Encontramos nuestro sitio en el arbusto al final del Washington Park.



Cuando el camarada lavrenti me encargó contar algo de lo que viví la otra noche en FestiMAD no cabía en mí de gozo. Un concierto increíble. Hay gente que dice que el año pasado en Septiembre fue más largo y mejor pero, para ser un concierto de festival (no nos engañemos), ¿qué cabeza de cartel se pega dos horas sobre el escenario en algún festival?. Pearl Jam son muy grandes, y lo demuestran concierto tras concierto; con más de quince años a sus espaldas no se dedican a promocionar su último disco y puerta, dejan a sus incondicionales rendidos por todo el mundo.

A pocos grupos con los años que tiene Pearl Jam los podrás ver en tan buena forma, con un Vedder simpático haciendo las delicias del público de cualquier ciudad, con sus chuletas en el idioma local. Incluso con coñas, como la que soltó en FestiMAD, con su “extraño” castellano, al decir que era un placer estar con nosotros esa noche, y más aún por estar ya fuera de Portugal. Momento en que todos nos miramos y pensamos que el tío es un cachondo. Poco después me enteré que la noche anterior en Lisboa dijo en un extraño portugués, ya a las tantas de la noche, que debían irse porque al día siguiente tenían que tocar en Madrid. Ante los gritos del público gritó un Foda-se Madrid!! y siguieron tocando para delicia del público lisboeta.

Éstas son las cosas que hacen grandes y queridas a las bandas. Ya sabiendo que son ídolos para mucha gente, mantienen ese humor y esas ganas de agradar al público allá donde vayan. Y todo esto sin hablar de lo estrictamente musical, donde dieron todo un recital de temazos dividido en tres bloques que, habiendo empezado su actuación puntualmente a las once de la noche, se alargó hasta la una de la madrugada.

Aguantar la primera media hora de concierto en las primeras filas fue toda una odisea, y es que nos estamos haciendo ya mayores para estas cosas. Pero mereció la pena; el ambiente entre el público era fenomenal y ninguno paró de corear todas y cada una de las canciones del setlist. Un setlist en el que combinan perfectamente las nuevas canciones con los grandes éxitos. Como el abrir con Porch, Animal, World Wide Suicide, Hail, Hail y Corduroy casi sin respirar. Ni ellos ni nosotros en el público, que hervía por momentos. Un primer bloque que navegaría por la discografía de la banda para acabar con una especial Alive que todo el estadio con su aforo de 20.000 personas cantó a pleno pulmón.

Hubo momentos para todos los gustos, amén de Vedder hablando en castellano chuleta en mano, brindando con nosotros por Madrid y por la vida con el mejor vino de España que le había llevado al concierto su amigo Javier. Luego nos enteramos de quién se trataba cuando en el último bloque del concierto salió al escenario Javier Bardem, un poco “chispao” ya como el mismo Vedder, para decirnos que Eddie le había pedido presentar una canción y que se había quedado blanco. Claro, todos pensamos que estaba blanco, pero de la cantidad de Vega Sicilia que llevaba ya en el cuerpo. Bardem se acordó de todos los momentos en que su corazón y el de todos nosotros había estado negro y dijo que Eddie quería que cantáramos con él Black. Un precioso Black con un emotivo final con todo el público cantando ese chururú chu chururú... chururú chu chururúúúúúúú mientras Vedder recorría el pasillo central que dividía al público para locura de los que allí pululábamos.

O momentos como los solos que se marcaron los dos guitarras, o ver al bajista con su contrabajo que daba al grupo ese aspecto de banda setentera de blues... Yo, personalmente, me quedo con el solo de batería que nos dejó boquiabiertos en una impresionante Even Flow.

Aparte de meter, como siempre hacen, versiones de temas míticos de bandas míticas que ellos admiran como fueron Another Brick in the Wall Pt. 2 de Pink Floyd, una preciosa I believe in Miracles de Ramones o la genial Baba O’Riley de The Who. Estas dos últimas en el último bloque con el que cerraron la noche y un FestiMAD Sur 2007 que dejó tan buen sabor de boca como debía llevar el mismísimo Vedder después de tanto vino bueno como tragó durante el concierto... Ojalá vuelvan pronto, porque con bandas como Pearl Jam da gusto ir a ver conciertos.

Más imágenes del sábado en la galería Festimad 2007 II.





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