WGT2012: Un Treffen de puretas

die Geburt

Como cada año, segun el mes de mayo avanzaba, un furor conocido comenzaba a adueñarse de nosotras alentado por imágenes recurrentes y la perspectiva de noches infinitas entregados al desenfreno en los beats (- póngame una de 165, gracias. - un the number of the best! audaz el señorito). Hasta que el cuerpo aguantara no dejaríamos centímetro de pista sin aplastar con nuestras botas; describiendo trayectorias con los brazos que ensalzaran a la lanza ideal que atraviesa la tierra, lanzada también ella a la carrera, sobre el circuito de su órbita. Las puertas de lo imposible acabarían resultando ser aquellas que se cerraban a medianoche en la habitación del piso 12 de un Westin cualquiera. Y es que cargando nuestras maletas debimos sospechar al cruzar la imponente recepción bajo los melancólicos sonidos de un piano del night cafe contiguo.

Treffen 2012, aquel que debía comprimir las ondas del tiempo hasta alumbrar una nueva era de estática y oscuridad, efectivamente significó una revelación, una nueva conciencia... la de nuestra provecta edad. Meine Damen und Herren, dispónganse a escuchar el relato de esta crónica de butaquismo ilustrado.

die Jugend

Los primeros momentos se asemejaban a experiencias pasadas; tranvía desde la estación y primeras fotos en el pasillo de la fama del Agra Park con algún cruce de miradas maliciosas y golpecitos con el codo ya, ya, a ver si aguantas tanto plasticucho tras tres horas de bum-bum-electro-harsh. Quedó claro lo que la mente nos demandaba y, sin embargo, el cuerpo nos pedía tranquilidad, buena letra y neofolk así que tras la energizante (lo que no engorda, sana) comida ayurvédica nos dirigimos a la cercana villa pagana a conocer en directo a los suecos Solblot (tras dos excelentes trabajos degustados en una genuina silla Markus, balón de siete hielos y coca-cola bien sujeta en la palma).

En el escenario estaban con sus mejores galas festivo-primaverales junto a Kim OTWATM y Oliver Sonne Hagal. Nosotras, dipuestas a lanzarnos a un Ränningen, pero el ambiente se enrareció por la presencia de dos vociferantes jovenzuelos-punk ultraborrachos (los primeros que hemos visto en todos estos años) en primera fila. Tan pronto zarandeaban las vallas como vomitaban y se caían redondos al suelo para levantarse y elevar sus brazos ensangrentados. En otros tiempos, quizá al ver las cuchillas cruzar los cielos, les hubiéramos dado palmas (olé, olé, you're a vampire y olé), pero sus propios amigos mostraban acusada verguenza ajena y nuestra reacción natural a estas alturas de la vida, y tras tanta escena en los baños del 6 y el Heaven, fue de desdén. El mismo que demostraba el dúo en el escenario cuando no intentos de fingir ignorancia de lo que acontecía. Claro, claro... viene un grupo de devotos de Suecia a grabar el concierto entero en vídeo, corean todas tus canciones y a dos de ellos no les conoces de nada, no?. La bronca en el aeropuerto debió ser incluso destacada en los medios aunque nos costaba encontrarla entre tanta noticia chunga de España en la edición germana del Financial Times (sí, lo cogíamos cada mañana en recepción para ver el estado de nuestros activos en los mercados).

En resumen, una buena actuación para amenizar la tarde pero sin mayores muestras de Grandeza, algo habitual en conciertos donde el mayor valor es el aplomo de los intérpretes. Podemos ver Medborgarsang en directo (y a los de seguridad recoger un cadaver en el 0.12)... y de regalo un enlace a En Dag - Del I con especial protagonismo de nuestros injustamente denostados Herreklasen felices (algo nos dieron para contar!).

Galería de Solblot

En el entreacto, lluvia de polén sobre los sufridos españoles alérgicos (para ser de la tierra del sol, sale un rayo y nos ponemos a estornudar), creando un marco incomparable, de belleza y molestia, que diera la bienvenida en su vuelta a los escenarios a los italianos Ordo Equitum Solis tras una época de retiro y cuidado de la familia.

El desarrollo no desmereció pero sufrió de ciertos altibajos; mostrando falta (normal por otra parte) de acoplamiento musical entre Leithana y Deraclamo (mirándose para seguir el ritmo, aunque compensado con muestras de intimidad), y su acompañante a la guitarra (del tipo yo tengo un amigo que es igual igual que él). Entrañable más que emocionante, y dulce que dolorido.

Galería de Ordo Equitum Solis

Ya en la oscuridad de la noche, qué mejor que un espectáculo de danza y fuego pensaron algunos. Pues no, con Las Fuegas al menos no. Salieron, le dieron un poquito al oriente y al rollete fantástico. Hicieron cosillas; siuuuu siuuuuu bola de fuego, trrrrmppppfffff llamarada! porque lo que es baile... ni un shimi decente oiga! ~~Poligoneras con cinturones de monedas~~ Jóvenes entusiastas con deber de mejorar para llegar, al menos, al nivel de espectáculo sonrojante.

Galería de Las Fuegas

Y la fría noche germana fue cerrándose al tiempo que crecía la ansiedad por ver al fin a Einar Selvik y Kristian Espedal, Kvitrafn y Gaahl. Wardruna desde el mismo día del anuncio se habían convertido en condición suficiente y necesaria para nuestra presencia en Leizpig. Runaljod es un disco de referencia cuando tratamos de rememorar nuestra herencia imaginaria nórdica y pagana, habiéndonos otorgado inexplicables momentos de exaltación y gracia, y grabado a fuego Algiz como aliciente a la voluntad en esta era de decaimiento y abandono por la tecnología. Tan alto volaban nuestras expectativas y aun así eran subestimaciones para lo que nos hicieron sentir desde la misma introducción ambiental y la presencia imponente en el escenario de todos los integrantes del proyecto en directo.

Grandiosos en una ejecución inmensa de cada uno de los himnos elegidos para la noche. Ni siquiera enturbiaban el momento dos compatriotas (el que es gilipollas y español, es gilipollas y...) haciendo comentarios -supuestamente- jocosos en voz alta sobre la homosexualidad de Gaahl. No dirían lo mismo si se encontraran a solas en su casa de Bergen (atadas a una silla).

Galería de Wardruna

Sólo una jornada y ya habíamos vivido un concierto que recordar lo que nos quede de vida. En plenitud, llegaba el momento de retirarnos.

die Erwachsene

En la mañana del sábado, las concurridas calles de Leipzig nos proveerían de unas cuantas experencias religiosas que compartir. La primera con una americana repartiendo octavillas de la web Gothic Christ con el lema Der herr hat gesagt, dass er im Dunkeln wohnen will (¿El Señor ha dicho que quiere vivir en la oscuridad?? dice Google). Difícil convertir a dos no-goths, atea y animista, aunque fuera una charla interesante. Y no digamos ya con el Hare Krishna que nos captó poco después. Más fácil hubiera sido caer bajo el influjo del grupo que nos encontramos actuando en una esquina de la zona comercial. Stilbruch con chelo, violín y batería interpretando Lord en acústico y haciéndonos vislumbrar momentos de magia post-seattle. Nos decepcionarían muchísimo en disco, Neuland, por lo que nuestras convicciones permanecen férreas.

Nuestro objetivo era alcanzar el Moritzbastei; un pequeño mercado medieval con actuaciones en directo durante todo el día en la parte superior de un restaurante y sala de copas que en la noche provee de cubículos en los que escuchar EBM a todo trapo y terrazas en las que fumar y codearte con lo más granado. Pasada la sobremesa en el parque de los alrededores nos dirigimos al Schauspielhaus, teatro que tan buenos momentos nos ha permitido vivir en ediciones pasadas y que en ésta nos permitiría vivir a Wardruna por segunda vez.

La primera actuación a la que asistimos fue la del trío de cuerdas con origen Seattle (estos sí!), Musk Ox. Albergábamos expectativas desde los artículos previos al festival y ciertamente cumplieron con largas creaciones plagadas de melancolía y brillante tristeza otoñal. No cumplen con el canon estético pero el festival y la actitud de muchas asistentes es ciertamente aperturista. El público asiste respetuoso y celebra con aplausos cada buena ejecución en directo, como sin duda era merecedores la formación.

Galería de Musk Ox

Y tras tan buena introducción conquistaron el escenario los noruegos para confirmar lo excelso de su propuesta musical y estética. El marco, bien distinto al del día anterior, permitía vivirlos de forma diferente aunque con la misma intensidad. Lo que se perdía por abandonar los parajes naturales se ganaba en calidad del sonido y la iluminación (aunque al ser trasera en todo momento hacía difícil tomar buenas fotos), y nos permitía discenir mejor los detalles ante el ominoso conjunto.

La actitud pétrea y desafiante de Gaahl (en más de una ocasión haciendo temblar a los técnicos cuando se dirigía al fondo a dar instrucciones), la concentración y fervor de Einar, y la timidez y claridad en la voz de Lindy. Sin embargo, por momentos vencía el conjunto y desconectábamos nuestro cerebro analítico olvidando la realidad circundante para dejar vía libre al trance y las sensaciones desatadas desde el fondo mítico de una herencia cultural (adoptada pero no por ello menos sentida). Elementos primigenios simbolizados en las runas reviviendo y Algir refulgiendo en los brazos para atravesar mares turbulentos y aceptar el futhark como guía.

Galería de Wardruna en Schauspielhaus

Y tras el extásis, vuelta a tierra con Unto Ashes y Joan van der Lieth (Sonne Hagal) con sus creaciones suaves de folk (a pesar de la residencia en Alemania de Michael sigue presente la influencia americana) ligeramente neo y ligeramente clásica. Como sus discos, no maravillan y no disgustan, haciendo de sus escuchas, como en este directo, un tiempo agradable. Sirvieron para matizar el furor y hacer posible una retirada a tiempo de los beats perversos en clubs de oscura raigambre.

Galería de Unto Ashes

die Pensionalter

Teníamos tantas ganas de ver a Jordan Reyne (más aún tras su buenísimo Children of the Factory Nation), que no podíamos creer que estuviéramos llegando a Schauspielhaus con el concierto casi terminado. Un amable acomodador nos llevo a dos butacas libres, afortunadamente, cerca del escenario cuando en alguna otra ocasión nos han impedido entrar por respeto a los artistas y espectadores o nos han enviado a los palcos. Apenas habíamos tomado asiento y Jordan anunciaba que comenzaba su último tema. La gran salva de aplausos que lo vió terminar hizo que, al menos, pudiéramos disfrutar de otro más, Kalsruhe. Podemos escuchar un fragmento al final de este vídeo...

Pudimos paliar en buena parte nuestro desconsuelo con la actuación de Evi Vine con la que si bien no habíamos conectado del todo en disco, su directo fue extremadamente emotivo. El alma rota y la pérdida irremplazable que se expresa a través de la letras y un post-rock lánguido nos hizo sentir esa sensación de frío interior tan acogedor en los momentos de debilidad de la voluntad. Pudimos escuchar al menos dos canciones que formarán parte de un próximo trabajo (¿principios de 2013?). Significó también un buen reencuentro con el bajista de Sonver, formación ya desaparecida (Jo Quail) que nos maravilló hace ya unos años en directo (pasado el tiempo sigue siendo un recuerdo recurrente y un aleciente para continuar una futura y deseada reunión). Háganse una idea de lo que les decimos con I'm not here...

Galería de Evi Vine

Hay que decir que el teatro estaba hasta los topes desde que llegamos e imaginábamos que en gran parte por la actuación "estelar" que cerraría la noche y nos alegrábamos porque un buen porcentaje de los presentes no conociera los dos proyectos anteriores; pero gran parte del calor del ambiente se debía al fervor por Qntal. Habiendo sido imposible verles en otra ocasión y, por coincidencias, tampoco a Estampie, cierto es que teníamos expectativa de vivir una gran experiencia. Cuan equivocadas estábamos!

Pudimos recabar alguna opinión al finalizar: el mejor concierto que han dado nunca, excelentes!, sin contar los aplausos entregados y vítores que invitaban al grupo a realizar dos bises. Por un momento temimos habernos visto atrapadas en una realidad paralela respecto al resto porque la nuestra estuvo plagada de disonancias en la interpretación, pérdidas de ritmo, gallos y tonos inalcanzables. Eso sin contar con la falta de gracia en la puesta en escena, más digna en ocasiones de un una primera clase de aprendices de popping que de una propuesta de electrónica etérea con influencias neoclásicas. Lo que se llama un butoh de chichinaboh.

Hasta en los grandes hits de su carrera (que por momentos hemos admirado en trabajos como V- Silver Swan u IV- Ozymandias), no se nos quitaba un cierto estupor que al transcurrir de los minutos se iba convirtiendo en una sensación plúmbea en el cerebro y peso en los párpados.

¿Estamos siendo injustas? No sería la primera vez, pero lo cierto es que al menos Michael Popp no parecía muy contento por sus aspavientos a los técnicos incluso llegando a abandonar el escenario para discutir en medio de un tema (cuando lo hace Gaahl es que es un tío chulo pero Michael no tiene derecho), a lo que musitamos entre nosotras: no es por como está sonando, es que está tocando fatal. Esto lo llamamos un auténtico "cochamfrito"...

os esperamos en nuestro próximo concierto, muzikerlll

Galería de Qntal

Visto lo visto, pocas ganas teníamos ya de irnos de fiesta aunque se nos estaban acabando las noches...

der Seneszenz

Y si de Jordan Reyne el día anterior habíamos lllegado a un par de temas, peor fue dirigirnos a la villa pagana a ver a Trobar de Morte y encontrarles saliendo por la puerta con los instrumentos. Les habíamos fallado el sábado porque coincidía con Wardruna pero esto ya era demasiado! Esperemos que Lady Morte pueda perdonar nuestros pecados y en el final de los tiempos nos permita acceder a su reino eterno donde por siempre suena Awareness. Al menos podemos ver su primera actuación al completo aquí...

Con cierta sensación de frustración, nos encaminamos al mítico Volkpalast a ver a Subheim y... llegamos a mitad de la actuación!! Para ver el principio de la actuación tendremos que volver a hurgar en youtube...

Calculando nos quedamos a la primera parte de Download por aquello de contarle a las nietas, yo estuve a diez metros de ceViN kEY, y salimos con tiempo suficiente para llegar a Parkbühne tan sólo para encontrarnos un cartel anunciando que se cancela la actuación de iLiKETRAiNS por enfermedad. Con tamaña suerte que estábamos teniendo, y aunque The Names era una opción grata, decidimos refugiarnos por tercer día consecutivo en las butacas del Centraltheater. Al menos para cerrar no nos equivocamos e Irfan ofrecieron una tremenda actuación en la que perderse con la imaginación por el extenso y complejo mesoriente. En ocasiones anteriores les habíamos visto con Denitza en la voz y su sustituta en el tiempo presente no hizo de menos en ningún momento. El grupo es solvente como pocos en todo tipo de situaciones y nos encantaron los intermedios de Kalin Yordanov para situar geográfica e históricamente cada una de las creaciones de la banda, o para homenajear a Dead Can Dance con una versión de Matawa...

Galería del cuarto día

Nuestras lectoras habituales estarán esperanda que ahora les relatemos la noche de cuerpos cimbreantes al son de los sintes que siguió pero lo cierto es que subimos a la habitación a dejar un par de cosas y nos quedamos dormidas. Sí, así fue.. lo cual nos lleva a hacer una promesa de que en WGT2013 arrasaremos. No será por iLiKETRAiNS (que esperamos que el próximo año sí puedan actuar), ni por cualquier otra banda por años deseada que vaya a actuar allí. No, será porque nos debemos a nosotras mismas sentir los beats retumbando en la espina dorsal. Tanta butaca y tanta...

Galería de gente en WGT2012

siempre!

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