Blood - Psike: La perfecta fusión entre Rammstein y el Pasodoble
yemeth
Los radares murciégalo de Muzike detectaron no ha mucho un nivel de promoción por encima de los parámetros normales en muchos de los lugares en que se reune la comunidad gótica en España sobre cierto grupo llamado Blood; un nuevo disco implicando una agotadora promoción del grupo, que parece estar teniendo su éxito (o al menos, mucha mucha promoción) en los países de habla hispana.
¡Y si hay una salvación para el gótico español, Muzike ha de estar ahí! Pues así se nos presenta en la omnipresente publicidad según uno se mueve por ciertos ambientes; por fin alguien hace algo en toda esta movida. ¡Albricias!
Así que a la salida del nuevo CD del grupo, Psike, intentamos escuchar el par de canciones dejadas libremente por el grupo y ver el vídeo. Digamos, que ya que lo lógico es hacer una crítica del CD al completo, lo mejor es olvidar. Soy insincero dado que he comprobado que siquiera ingentes cantidades de alcohol pueden hacer olvidar la fusión entre Rammstein y pasodoble del tema "Orgasmatick", y que en cierta fiesta de nochevieja se destripó el video "Conciencia" sin piedad alguna. Pero aun así, estoy dispuesto a utilizar todos mis recursos mentales para sentarme y escucharlo de principio a fin. Sin prejuicios. |  Nuestro héroe abrazando a una columna, nos deleita con su moreno Agromán |
Y al comenzar la música con los latidos de corazón que cesan hasta un pitido final (me refiero a la canción, mi corazón por suerte aún funciona), me vuelvo a preguntar aquello que ya planteé a Pain, ¿en qué punto una crítica sería demasiado destructiva? ¡Silencio mental! Todo sea por Muzike, y con este convencimiento en mente paso al segundo tema, Sangre.
Empezamos con un sinte un tanto demasiado electrónico, que se acompaña con una melodía machacona una guitarra eléctrica. Destacaría que mientras los primeros tres minutos de la canción son tan sólo una especie de mezcla mediocre entre Project Pitchfork y Rammstein, más allá llega el desbarre; ojo a la forma en la que la voz va a su bola, y los cambios de ritmo.
Y ahora sí, llega el temazo con el que está hecho el video, "Conciencia", y yo por un momento me siento en el Scorpia y empiezo a mover el brazo frenéticamente en plan bakala mientras una lluvia de pastis humedece mi pelo al viento. Por suerte poco después me devuelve a la realidad la consabida guitarra imitación de Rammstein. Strings con unos deslizamientos entre notas hechos con secuenciadores de hace 20 años (¿será un homenaje a Kraftwerk?) y la inconfundible voz del cantante, le dan una cierta variedad a esta... fusión entre varios mundos.
El electrónico de fondo acompañando la guitarra, esta vez para variar con sintes que se deslizan como la banda sonora de un juego de videoconsola antigua, se impone del todo en el cuarto tema, "indemnes". Mientras tanto, se hace insuperable la nula expresividad del cantante, fingiendo emociones para estar a la altura del resto del conjunto.
Continúa un tema algo más lento, "no mas", del que ya sólo se me ocurre decir mediocre, mientras me arrastro a través de sus cinco minutos de tortura esperando al siguiente. ¡No! ¡Me niego! ¡Por la música lo que sea! Y cuando el cantante entona "eutanasia o piedaaaad, me da igual quiero morirrr", por fin me siento identificado con él. Esto es un principio. Podemos entendernos. Siento que las cosas pueden arreglarse a mitad del CD. Tras otro cambio de ritmo espectacular, llega en el minuto 4:08 para llevar la melodía el sample más horrendo que he oído en mucho mucho tiempo, y empiezo a preguntarme si es que hay una broma que no he cogido. Miro alrededor, y no hay cámaras ocultas. Pues esto hay que hacerlo aposta. No puede ser casualidad. Por todos los dioses, que tema más malo.
 Derrumbando Matrix nota a nota | Yo había jurado ante el tótem de Trent al que sacrifico cochinillos todas las noches que sería fiel a la labor de crítico musical sin dejarme influir por nada, ¿pero puedes empezar de cero con cada tema, esperando encontrar algo, si cada canción es una nueva destrucción de tu oido?. Porque ojo a la percusión con la que empieza "pena de vida", antes de empezar a acelerarse. El tipo que elige los samples merece una agonía lenta y dolorosa, que sólo sea superada por el que los mezcla. Y en el minuto 2:15 ya viene el megacambio de ritmo para dar el acelerón. Os lo juro, este CD es una experiencia infernal. Maldigo el momento en el que decidí encargarme de él. Unas risas te las echas con un tema, pero este ese el sexto, estoy cansado y no llevo ni la mitad del disco. |
Séptimo tema, "víctimas". Trent me ha escuchado y me ha dado fuerzas. Sería más breve, pero si yo me he tenido que comer este disco vosotros os comeis el artículo, es lo mínimo que podeis hacer. Este es el tema del bailoteo goth, así con samplecillos cutres, puede dar para tejer en el aire alguna telaraña que otra. Bueno, lo sería si no cantase nadie, pero es que en esta cosa experimental ya no cuadra nada de nada. Yo canto, tu dale a la bateria y el otro que meta los samples, y a mi no me preguntes. La forma en la que al cantar alarga las consonantes es espectacular, y el "por qué no" ya empieza a recordar los cánticos de un partido de fútbol. Y es que fue Muzike quien quiso inventar el post-goth mezclando en lógica conclusión a bakalas, futboleros y góticos, pero gente con más ojo comercial está comiendonos el mercado. Ojo al sólo de guitarra poco después de los 4 minutos de canción.
Este par de canciones que vienen ahora son las que tienen a libre disposición en la web. "El guia" y "Orgasmatick". Lo cual es terrible, porque eso implica que ya las he oído. Así que me ahorraré el comentario, me las salto y no tengo que oirlas otra vez, que podeis oirlas de gratis. Sólo parafrasearé al compañero Pain en nuestra escucha compartida, "¡mira, mira, que entra el guitarra to enzarpao con su ampli del Pryca!".
"No pueden quedar todavía cuatro temas", e incluso Trent se ve triste en su tótem. "Juntos lo lograremos", susurro, mientras el tema "Neander" entra. El título del tema es referencia al secuenciador que usan, claro. Me sumerjo en un sopor del que sólo me despierta el regreso del Scorpia con el que entra el siguiente tema, "ánsia", pero no evita que se me acumule el cansancio mientras me repito que sólo quedan este y dos temas más. Al menos la forma en que una segunda voz peor todavía que la del cantante dice "No hay mássss esto e lo que hayyyyy" me hace volver a reirme a carcajadas, que ya me hacía falta...
Penúltimo tema. Trent, deja de darte cabezazos contra la pared. Todo porque al escorpias se nos añaden más samples de coros de esos tan bien mezclados, y cuando no cabe la frase se canta más deprisa aunque se vea que no, que no cabe.
Por suerte, el último tema es sólo un fichero MID cortando samples como sólo en Blood saben hacer, que suena a película de terror mala de hace medio siglo. Y es que da igual, si hay que cambiar de nota se le pega un tajo al sample por donde sea y todos contentos.
El CD de remixes, para los masocas. Lo siento, no me contéis entre ellos; este es el momento de decir basta. Quiero decir, tampoco es tan malo que sean una copia exageradamente mala de Rammstein; los Sober tiraban de TooL pero hicieron cosas buenísimas mientras tanto. Pero es que con Blood no hay por donde cogerles. Son tan malos que parece que lo hacen a propósito. Sin embargo ahí los tienen adoptados en unas cuantas comunidades de góticos como la gran esperanza de la escena gótica española.
Quiero creer que buena parte de esta unanimidad se debe al efecto gotipuntos (si te introduces en un grupo que los aprecia, ¿te convencerás de que te gustan para no perder gotipuntos o para no ofender a nadie? ¿qué mentes malvadas han diseñado esta conspiración?), pero esto ha de parar en algún momento. Lo entendería todavía con un grupo que sencillamente "no dijera nada", pero estos son como un Ed Wood de la música carente de estilo. ¿Estamos perdiendo nuestro oído musical? ¿Se acerca el post-goth? ¿Llegaremos de verdad a oir cánticos de fútbol con guitarras Rammstein? ¿Y Within Temptation, que opinan de esto? Sólo el tiempo lo dirá...
Así que en fin, para no excederme en mi ritual diario de la quema de bandera española, pondré a los Nothvs Filivs Mortis y pensaré que no, que no se trata de una tara genética que arrastramos los del suroeste europeo.
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