El fantasma y el hada... y un príncipe redivivo

Ancient Shadows es el álbum debut de la ilustradora, cantante y compositora Priscilla Hernández. Este trabajo te llevará a un mundo de fantasía: cuentos de hadas oscuros, románticas historias de fantasmas, y alucinaciones hipnagógicas que habitan en los límites entre el sueño y la conciencia.

A partir del amigo Elderane conocimos nuevasmusicas.org y con timidez nos fuimos interesando por algunas de sus propuestas etéreas, angelicales, neoclásicas (*ahem* góticas *ahem*); en los dominios de lo musicalmente leve y sensible. Y entre ellas iba destacándose la figura de su promotora, Priscilla Hernández, accesible a nosotros sólo a través de las muestras en myspace.

Supimos tarde, respecto a su lanzamiento, de la existencia de Ancient Shadows y no fue hasta Molins de Rei, allí donde los caminos se cruzan, y el Ethereal Fest que pudimos recibirlo como presente de valor no estimable. Volviendo a este lado de la frontera de Greenwich (en la Ilusión más para acá) nos entregamos a una, emocionalmente permeables, primera escucha.

Ante nosotros se desplegaba un trabajo extremadamente dulce e imaginativo, marcado por un carácter dual desde su propio subtítulo, explicado a través de dos libretos diferenciados y tejido en torno a temas de diferentes ambientaciones. El fantasma y el hada, siempre desde una perspectiva irreal y fantástica, creando ensueños de misterio y ligero temor reverencial, pérdida y soledad, complementados por pasajes encantadores de existencia plena, contemplación extática de la naturaleza y comprensión de la sabiduría ancestral. Pasiones, temores y esperanzas; realidades de la autora accesibles para el oyente entregado.

Casas encantadas, sauces llorones, espectros enamorados, ninfas, hadas, terrores nocturnos... una fantasía en los reinos del crepúsculo contenida en diecinueve temas que compendian el trabajo de esta artista multidisciplinar a lo largo de los últimos años. Atesorando más de dos millones de escuchas de sus temas en Internet, y tras rechazar contratos discográficos en un intento por mantenerse fiel a la idea original, Priscilla funda su propio sello, Yidneth, y con la ayuda de un buen número de donanntes, edita en noviembre de 2006 este disco en un esmerado digipack que presenta diseños de la propia Priscilla y fotografías retocadas tomadas por Héctor Corcín.

Contando con la colaboración de otros artistas en las guitarras o el chelo (ver ficha), y con el esfuerzo compositivo e interpretativo principal de la propia Priscilla; se abre la posibilidad a la interpretación en directo tanto en teatros, festivales como en televisión, con una cuidada puesta en escena.

más vídeos aquí

Así, escucha tras escucha, fuimos tomando notas con las que dar forma a un artículo que, quizá publicándose un poco tarde, intenta crear interés en aquellos que no lo conozcan, y pretende (de forma engreída a lo muzike.org) ser un homenaje al esfuerzo y cariño que lo concibieron y forjaron intemporal. Desencadenando la esencia Otherkin, mítica y/o folclórica, de nuestro alma, nos embarcamos, pues, en un recorrido por los parajes de Ancient Shadows (con la ayuda inestimable de las notas aportadas por la propia Priscilla junto a las letras de las canciones).

Priscilla Hernández - Ancient Shadows (promo)

1. Facing The Dream (Opening Credits)
2. Away
3. Ancient Shadows
4. But If You Go
5. I Steal The Leaves
6. The Call Of The Nymph
7. The Willow's Lullaby
8. Nothing
9. Haunted
10. Nightmare
11. Fairy Tale
12. The Realms Of Twilight
13. The Voice Of The Night
14. Lament
15. Ahora Que Te Has Ido
16. The Prince And The Fairy
17. I'm Right Here
18. Sueño Muerto
19. Facing The Dream (Closing Credits)

Puedo sentir su espíritu alrededor, su gélido aliento en mis mejillas, temida espíritu en la tensa introducción, deseada presencia en Ancient Shadow. Perceptible aún inmaterial; idealizado al cerrar los ojos y sentir levemente que pasea sus manos por nuestro cuerpo sin llegar a tocarlo, sin llegar a realizarse.

Misterioso arrullo en de La nana del sauce y advertencia susurrada a perdernos en los sueños elaborados por su llanto. Al desaparecer él quedará en nosotros sólo la amargura...

Lleva luto por el bosque
que una vez habitó
Llora por los pájaros
que abandonaron sus nidos
y volaron lejos...

El paraiso y la trampa de las aguas silenciosas nos amenaza, y nos ofrece un sentimiento pleno, en la Llamada de la ninfa atrapada en el frío fondo de las aguas intentando emerger en libertad. Se alimenta de las almas de los que acuden a su llamado en la quietud de las aguas y los rayos filtrados a través de los nenúfares. Las flautas llaman, las panderetas surgen tenebrosas.

Hasta que la aparición esencial del piano y el chelo en Nothing construye el quejumbroso canto del encerrado en la pérdida que siente como el tiempo pasa entre sentimientos de incapacidad, vacío, y necesidad de volver a la luz como las polillas cegadas por el resplandor. Please be back to me!

Abandonados, como la casa de paredes resquebrajadas, muebles polvorientos y jardines salvajes. Hogar de los dioses sin nombre y sombras fantasmales, creando una leyenda de encantamiento en torno a los vientos simulando voces y risas tenebrosas en segundo plano.

Y las sombras se perfilan y los manos huesudas de largas uñas se abaten sobre nosotros en la Pesadilla no deseada que debilita. Si el bajo anterior todavía seguía generando el encanto del miedo infantil, el final aquí se desata en un pandemonium caótico que parte el desarrollo del disco.

Quizá haya llegado el momento de acercarnos a Fairytale para sentir de nuevo la seguridad en un nuevo "Érase una vez" que reinicie el cuento de hadas. Así recuperada la inocencia perdida seremos de nuevo recibidos con candor en abrazo para entrar en Los reinos del crepúsculo y oir en sus brazos el arrullo de la noche. Hay sabiduría en cada sonido que sana mis cicatrices ahora que estoy herido.

But when you feel your light die down
just call our name
and we'll be back to keep you blaze
oh safe with us
glowing, glowin again
in the realms of twilight

Tratamos de recuperar los sentimientos de entrada en este trabajo que quedaron Lejos, en aquella bella canción nostálgica de electrónica grácil, percusión leve, y piano que temeroso trata de reintegrarnos y abrirnos la posibilidad de escapar de nuestros caparazones y los ecos del grito, atraídos por iris sin fondo y flautas orientales.

Un regalo y una maldición, tan débil e inseguro. Mi corazón explota de alegría pero luego duda, se acelera y queda en suspenso como si no fuera a volver a latir. ¿Y si también te vas?

You're there to believe
if I lose all faith in myself
you're there to believe in me

No habremos de temer porque lo que marcha como las hojas robadas en el otoño acaba retornando con la primavera. Mi voz se eleva en esta canción que trae un silencio más profundo que una tumba, en una de las canciones esenciales embellecida con desmesura en torno a los pianos y las guitarras acústicas. Yo soy tu valor y tu duda interna.

The voice of the night llega para recogernos en un lecho de estrellas, y permitirnos descansar los viejos ojos doloridos y sanar las cicatrices. No vaya a ser que vivamos en Lamento y acabemos maldiciendo la tierra y los árboles y los ríos, aterida el alma por la inevitable pérdida. En dolor Ahora que te has ido, las heridas que no pueden sanar se extienden hasta lo eterno.

It aches, how deep it aches
It hurts, how deep it hurts

El horror crece al creer que todo lo perdido nunca podrá ser recuperado, y que ciertos sentimientos nunca podrán volver a alcanzarse. Parece que el descenso es imparable y que sería mejor que todo se desvaneciera, que todo fuera destruido. Pero...

Me dolería más no recordarte que echarte de menos, en un tema instrumental que sirve de homenaje (como todo el disco) de Priscilla hacia Kira.

Podríamos habernos abandonado al olvido, pero lentamente la instrumental The prince and the fairy hace resurgir la fantasía, sin necesidad de palabras, a través de sentido chelo y piano. Es cierto que Estoy justo aquí, y la fantasía del amante inmaterial se torna en realidad. Intangible trato de sentir tu respiración descansando mis labios sobre tu cuello. Y puedes sentirte arropada, y puedo sentir ardimiento en tu cuerpo.

Y los velos del ensueño se debilitan y, aunque indecisos, tratamos de aferrarnos a la leve voz que todavía eleva un moribundo sueño desde nuestro interior. Más tenebrosa se nos aparece la realidad ahora que el mundo onírico se desvanece. Priscilla nos susurra Niña, en pie! Aquí está tu nuevo sueño

Tras una existencia creyendo ir en busca de nuestros sueños acabamos percibiendo que en realidad son ellos los que andan al acecho e inevitablemente nos darán caza. Asumiendo tal necesidad épica habremos de enfrentarlos, ya sea plenamente bellos, ya dolorosos y temibles.

Ancient Shadows es un disco frágil, lívido, brumoso; y al tiempo, candoroso y fortalecedor. Muchas sensaciones y ambientes diferentes, inicialmente pueden dejar una sensación de un todo inconexo. Es entonces cuando hemos de recurrir a las letras y las explicaciones del libreto, a las fotografías y los dibujos, y el conjunto queda ensamblado y refulgente. Homogéneo a través de la voz de Priscilla, tremendamente bello en las instrumentaciones y fuertemente sensitivo en los argumentos.

Para algunos que abandonamos la infancia percibiendo el mundo externo como una agresión, consigue hacer resurgir la pulsión a volver a un pasado glorioso en que los mundos inexistentes se erigían estables. Así alienta a persistir en la creencia y la esperanza de que lo antiguo, lo eterno, ha de llegar de nuevo a nosotros. En luz y sombra, placer y temor; en búsqueda del Conjuctio Opositorum a través de las multiples paradojas y de la inestabilidad, y, por ello, de la posibilidad sin fin en la Ilusión.

Puedes adquirir el disco en Yidneth.

Y al final... una advertencia:
You have stolen all our forests
What if we rise to claim them back
and return as fair as bright?
Beware, mankind, beware...

Artículos relacionados:

Dam - The Difference Engine

Luchador es el que lucha en la lucha